Estos profesionales de Atención Primaria adquirirán más responsabilidades y funciones para ahorrar
Estos profesionales de Atención Primaria adquirirán más responsabilidades y funciones para ahorrar
20.04.11 - 00:04 -
MARIANA CORES | SANTANDER.
La sociedad asume una imagen del enfermero relacionada, simplemente, con las inyecciones o un vendaje primoroso. Sin embargo, su capacidad va mucho más allá. El Servicio Cántabro de Salud (SCS) tiene en marcha un proyecto, aún en borrador, que ampliará considerablemente las funciones del colectivo de Enfermería. El objetivo es liberar de funciones a los médicos y ahorrar dinero a las arcas del Gobierno regional.
Según el director de Enfermería de Atención Primaria, Abraham Delgado, el nuevo rol que desempeñarán estos profesionales va dirigido al seguimiento de los enfermos crónicos, educar en prevención y promoción de la salud o la participación en la atención de urgencias y emergencias.
«La evolución de las necesidades de la sociedad requiere también un cambio en la actividad asistencial», justifica. Mientras que «el siglo XIX fue el de las enfermedades infecciosas, el XX el de los pacientes agudos, este siglo corresponde al de los enfermos crónicos. Cada vez la gente se muere más tarde, pero pasan sus últimos años con muchas enfermedades». Por eso cobra relevancia el enfermero, que tiene capacidad y derecho a demostrar sus conocimientos, con el objetivo de liberar de ciertas tareas al médico. Pero también se debe de producir un cambio social, asevera.
Delgado apunta cuatro puntos sobre los que pivotarán las funciones de estos profesionales: la educación para la salud en la promoción de hábitos saludables y prevención de enfermedades (que ya se está aplicando); la atención a los procesos agudos; la atención a las urgencias y emergencias; y la atención a las patologías crónicas, favoreciendo el autocuidado y la autonomía del cuidador.
El nuevo proceder en la atención a la patología aguda ya se está aplicando en otros países, como Reino Unido. «Se les da a los enfermeros una mayor autonomía y responsabilidad sin necesidad de supervisión y así se evitan las derivaciones innecesarias el médico», expone.
En cuanto a las enfermos crónicos, el director de Enfermería aclara que «si a un diabético se le explica qué debe comer, cómo aplicarse la insulina, cómo controlar el azúcar o qué hacer en caso de encontrase mal, se avanza considerablemente en la mejora de su calidad de vida y se evitan visitas innecesarias al médico».
El ahorro económico también es importante, por ejemplo, en los enfermos de EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica). Por una lado, «somos nosotros quienes hacemos la prueba diagnóstica (espirometría), pero también educamos en el buen manejo de los inhaladores, lo que hace que se aprovechen mucho más y no se despilfarren».
Este tipo de pacientes «ya están diagnosticados y tratados por el médico. El papel del enfermero es el del seguimiento personalizado de estos pacientes que tienen patologías como la diabetes, hipertensión, obesidad, etc.», asegura.
Más barato prevenir
También resalta la importancia de la educación, «y más en un momento de crisis como éste, porque, además de mejorar la calidad de vida de las personas, es más barato invertir en prevención que en la curación».
Desde su punto de vista «hay que prestar atención al cuidador. Si se le indica cómo, éste puede hacer que el enfermo sea más autónomo y a la vez mantenerle en unas buenas condiciones de salud que no precise su continuo ingreso hospitalario».