La atención sin sujeción humaniza el cuidado y dignifica a la persona

  • 03/07/17
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Actualmente, en Cantabria el 25 por ciento de las personas mayores de 65 años recibe la ayuda de los servicios sociales y más de 8.300 cántabros están siendo atendidos en sus domicilios, según los datos facilitados por el Instituto Cántabro de Servicios Sociales y del Ayuntamiento de Santander, lo que obliga a las administraciones públicas a establecer un modelo de actuación futura de larga duración que cuente con la aprobación de todos los miembros partícipes

Con el objetivo común de humanizar y de avanzar hacia un modelo de atención a las personas dependientes centrado en la persona y en el respeto de su autonomía personal, se ha celebrado el pasado día 30 de junio, en el Paraninfo de la UIMP, una jornada bajo el epígrafe “Avanzando hacia la atención sin sujeciones”. La organización del evento corrió a cargo de la Dirección General de Política Social del Gobierno de Cantabria, junto con la Sociedad de Geriatría y Gerontología “Gregorio Marañón” y el Colegio de Enfermería de Cantabria que unidos bajo el objetivo común de liberar a Cantabria de las sujeciones, analizaron diferentes propuestas y alternativas. Aspectos como el trabajo multidisciplinar, la humanización de los cuidados, la formación y la puesta en común de un modelo basado en las necesidades de las personas fueron algunos de los elementos de coincidencia para el abordaje del principal objetivo de la jornada: avanzar  hacia la atención sin sujeciones en Cantabria.

Por su parte, la vicepresidenta regional, Eva Díaz Tezanos, aseguró que el Gobierno quiere que los centros del sistema público de servicios sociales sean declarados libres de sujeciones para los pacientes y ha avanzado una batería de medidas en las que ya trabaja la Dirección General de Política Social. "Las sujeciones deberían ser la excepción y no la regla, y mantener la movilidad debería ser la verdadera regla de funcionamiento", ha asegurado Díaz Tezanos, durante la inauguración esta mañana de la jornada "Avanzando hacia la atención sin sujeciones".

Teresa Rodríguez Ramallo, directora de Cursos para Extranjeros de la UIMP; Ana Rodríguez Valcarce, presidenta de la Sociedad de Geriatría y Gerontología de Cantabria “Gregorio Marañón”; Rocío Cardeñoso Herrero, presidenta del Colegio de Enfermería de Cantabria y Eva Díaz Tezanos, vicepresidenta del Gobierno de Cantabria, fueron las encargadas de inaugurar esta jornada de trabajo centrada en la implantación de programas libres de sujeciones en residencias y centros de día. Por su parte, Iñaki Artaza Artabe, presidente de la Fundación Envejecimiento y Salud de la SEGG, junto a las enfermeras Sara Fernández del Corral y Carmen Arestín Ortega, analizaron el futuro inmediato de los programas libres de sujeciones desde la perspectiva de la comunidad científica y los colegios profesionales. La situación real en Cantabria y el punto de vista de los profesionales y familias corrió a cargo de Mónica Pérez Pardo, vicepresidenta de AFA Cantabria, Teresa Pampín Fernández, directora del Centro Residencial Sanitas Santander y de Beatriz González Varela, directora de la residencia Las Anjanas (CLECE), bajo la supervisión de Lourdes Bermejo García vicepresidenta de Sociedad de Geriatría y Gerontología de Cantabria “Gregorio Marañón”. Ambas mesas coincidieron en una idea común: “La atención sin sujeción humaniza el cuidado y dignifica a la persona”.

La jornada de trabajo se clausuró con la intervención de Ana María Urrutia, presidenta la Fundación Cuidados Dignos, con quien recientemente el Colegio, a través de la Fecan, firmó un convenio de colaboración. La Fundación Cuidados Dignos ha conseguido que más de 6000 pacientes españoles estén libres de sujeciones y que  21.000  disfruten de este modelo de cuidado  en más de 150 centros especializados.  Un objetivo en el que continúan trabajando porque en España aún hay entre un 20 o 30 por ciento de centros asistenciales que utilizan sujeciones en sus pacientes,  mientras que en os países más desarrollados de  Europa este porcentaje solo alcanza el 5 por ciento.