Tribuna en el Diario Montañés: "El futuro sanitario: un nuevo modelo centrado en la prevención y en la atención a la cronicidad"

  • 25/11/13
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Rocío Cardeñoso. Presidenta del Colego de Enfermería de Cantabria

La sociedad actual necesita más cuidados, necesita más enfermeros

Nuestra sociedad ha cambiado en las últimas décadas y los ciudadanos no tenemos las mismas necesidades en salud que años atrás. La población española ha envejecido y tiene miles de pacientes crónicos que necesitan una atención programada y experta en cuidados. Además, es imprescindible un plan dirigido a la prevención de complicaciones, a la detección precoz y a la promoción de la salud, como eje fundamental en la atención. Tenemos un modelo muy eficaz en la atención aguda, consecuencia de la necesidad sanitaria de la población española de los años 70, pero que poco tiene que ver con las necesidades actuales.

La realidad y los datos de hoy nos indican que el futuro de la sanidad pasa por un cambio de modelo en el que se compatibilice la atención aguda con la atención al paciente crónico en todas sus fases de complejidad. Un modelo diferente, que no se base en el ingreso o el seguimiento desde un hospital de alto nivel, porque supone un alto coste para el paciente, su familia y el sistema cada vez que se produce una reagudización de una patología.

Es necesaria la creación de un modelo donde se revisen, dirijan y planifiquen los cuidados a los pacientes crónicos, con el objetivo de mantener y mejorar la calidad de vida de las personas. Unas prácticas que están en manos de los profesionales de Enfermería, y un análisis que ya ha tenido reacciones por parte de algunas Comunidades Autónomas, que han puesto en marcha el Plan de Atención a la Cronicidad, y de otras, como Cantabria, que está empezando a definir estrategias claves para el nuevo panorama socio-sanitario.

Como profesionales de la salud y expertos en cuidados, los enfermeros estamos convencidos de que hay que apostar por un envejecimiento saludable, autónomo y pleno; por la prevención y promoción de la salud; y por el control de la patología crónica y la prevención de complicaciones de dicha patología. La mayoría de los países del norte de Europa ya han adaptado su sistema sanitario a este nuevo modelo, y por eso tienen el doble de enfermeros por cada 100.000 habitantes que los que tiene España, que es el tercer país de Europa por la cola en el ratio de enfermeras.

España registra 5,5 enfermeros en activo por cada mil habitantes, frente a los 8,7 de la OCDE. Además, según el “Informe sobre los recursos sanitarios en España y la Unión europea 2013”, elaborado por el Consejo General de Enfermería, del total de profesionales sanitarios europeos, un 30,78 por ciento son médicos y un 69,22 por ciento enfermeros, porcentajes bien distintos a los que registra España, donde un 45,80 por ciento de los profesionales sanitarios son médicos, y un 54,20 por ciento enfermeros.

Los ratios de los profesionales hay que ajustarlos a las necesidades del sistema sanitario, y éste, a su vez, a las de la sociedad. Esta es la razón por la que consideramos adecuados los nuevos criterios que está desarrollando la Consejería de Sanidad de Cantabria a través de la gerencia de Atención Primaria, para ajustar el número de profesionales a las necesidades de la población, incorporando y aumentando de manera progresiva la plantilla de enfermeras en los equipos de Primaria donde la población es más envejecida y dispersa, y precisa de atención de cuidados a domicilio.

Por lo tanto, hay que potenciar el rol de la enfermera comunitaria como gestora de casos, sobre todo, en base a los resultados de otras CCAA, que ya lo tienen desarrollado, como Valencia, cuyo consejero Manuel Llombar, asegura que “gracias a la implantación de este programa, las visitas a urgencias y los ingresos hospitalarios de pacientes con patologías complejas han disminuido, de media, un 70%, con los beneficios que supone en primer lugar para el paciente, para su familia y también para el sistema sanitario valenciano”.

Estas enfermeras se encargan de identificar al colectivo de pacientes complejos en cada departamento, como enfermos crónicos avanzados y pacientes paliativos, en su mayoría con ingreso domiciliario; y ponen en marcha una respuesta sanitaria en función de sus necesidades, coordinan el apoyo y atención a sus cuidadores, y realizan el seguimiento y la continuidad asistencial del paciente.

Creemos que hay que ser valientes, novedosos en gestión de recursos y de iniciativas, y siempre ir en busca de mejorar la calidad de atención a los ciudadanos adaptando los servicios a las necesidades de la sociedad.